Roby
Gáttiker, único jugador campéon
en los cinco mundiales realizados
"Me gustaría poder
manejar al pádel argentino"
No
tiene currículum, más bien tiene prontuario.
Ocho títulos mundiales -cuatro por parejas y cuatro
por equipos-, Olimpia de Plata en 1993 y una hegemonía
de una década en el liderazgo del pádel
internacional, junto al ya retirado Alejandro Lasaigues.
Hoy Gáttiker continúa compitiendo junto
a Cristian Gutiérrez -con quien ganó la
etapa de Miramar- y se prepara para afrontar un 2001 plagado
de compromisos.
reportaje
de Guillermo
Russell
¿Cuáles
son los proyectos para el 2001?
R.G.: Estoy con una pretemporada muy fuerte, la idea
es seguir jugando con Cris (Gutiérrez), ya que
estamos muy contentos de jugar juntos, e ir a jugar
el circuito español. También quiero apoyar
al pádel argentino de cualquier manera, estando
en la APP, o tratando de hacer torneos, porque a mí
el pádel me dio muchísimo, y creo que
es un deporte que puede dar mucho más acá,
y que le falta apoyo y ayuda de la gente.
¿Cómo
estás con tu juego?
R.G.: Muy bien, siempre mi vida fue el deporte. Sé
que ha gente que cree que no entreno, pero entrené
toda mi vida porque no puedo vivir sin hacer deportes,
pero a mi manera. Jugaba al tenis, hacía un montón
de deportes, hacía gimnasia, pero nada sistemático.
Desde el año pasado que estoy preparándome
muy fuerte, con pesas, con gimnasia -gracias al apoyo
de Darío Fernández y al Gimnasio Tango-,
con pádel, con entrenador, con todo, y realmente
me siento espectacular, y a su vez mentalmente estoy
muy bien, con muchísimas ganas porque disfruto
muchísimo jugando. Creo que estoy en un momento
excelente. Igual lo más importante en el pádel
para mí es la pareja. Yo creo que pueden juntarse
dos jugadores pero hay que formar una pareja, por eso
creo que Reca-Nerone es una excelente pareja, porque
más que nada se complementan muy bien, individualmente
pueden ser o no grandes jugadores, pero juntos son una
muy buena pareja.
Con Cristian creo que podemos llegar a muchísimo,
es un jugadorazo y juntos podemos ser una pareja muy
buena.
¿En
qué está trabajando él?
R.G.: Ahora está haciendo gimnasia, la idea es
que a principios de marzo hagamos una pretemporada fuerte
juntos para llegar bien afinados a la temporada y hacerla
fuerte desde el comienzo.
A veces la gente espera mucho de Cris y de mí,
por nuestros logros personales, porque somos campeones
mundiales, pero tenemos que complementarnos muchísimo
todavía. Hay parejas como Díaz-Vilas,
que se matan entrenando, y juntos son una muy buena
pareja. Cristian y yo somos buenos, pero nos falta complementarnos
como pareja, y eso se logra adentro de la cancha.
¿Cómo
terminaste el 2000?
R.G.: Hubo muchos cambios. Para mí fue buenísimo,
empecé jugando con Alejandro Lasaigues otra vez,
la idea de Ale era retirarse jugando conmigo, al principio
me gustó pero pasaron varias cosas, cuestión
que no terminé jugando con Ale.
Fue la época que más estuve entrenado,
y empecé a jugar con un brasileño, Marcelo
Jardim, que juega muy bien pero que había jugado
muy poquito internacionalmente, y la verdad que me fue
muy bien. De cinco torneos que jugué con él
gané uno, perdí tres finales, le ganamos
a Reca/Nerone, le ganamos a Lahoz/Arias, le ganamos
a todas las parejas, y a mí mentalmente me vino
muy bien, porque todos lo tenían a Jardim como
un jugador mediocre, y como que se sorprendieron bastante.
En la primer época la prensa se movía
mucho alrededor de Alejandro, bastante manejada la cosa
(igual yo siempre jugué por el deporte y no me
interesaba), pero fue una manera de demostrarle a la
gente lo que yo podía hacer como jugador, y realmente
respondió muchísimo. La gente, los sponsors,
me respondieron muy, muy bien. Después de esa
gira fue impresionante. Y mentalmente me vino muy bien,
aparte me di cuenta de que estando entrenado y con ganas
se puede hacer muchísimo.
¿Cambió
mucho el pádel?
R.G.: Sí, en velocidad y potencia, en posición
en la cancha, antes el drive era muy defensivo, ahora
los dos le pegan fuerte. El saque y volea cambió
mucho también.
Hay un tema, que para mí es el único error
que tiene el reglamento del pádel, que es la
regla que dice que hay que sacar de debajo de la cintura,
que no la cumplen ni el quince por ciento de los jugadores.
Antes, por más que te sacaran fuerte, vos la
metías y podías empezar el punto de esa
manera. Ahora, por ejemplo Auguste/Díaz te sacan
de arriba, entonces vos casi no la podés meter,
y te hacen pum y te la sacan, y se cansan de sacar pelotas.
Hacen mucha diferencia, quebrarles a ellos un saque
es como quebrarle a Sampras. Sacan alto, vos les decís
algo, sacan de abajo, y al otro tiro ya están
sacando de arriba, aparte como los árbitros no
tienen personalidad, terminás no diciéndoles
nada. Esa es la peor regla que tiene el pádel,
por eso era mejor el otro sistema, porque, aunque te
sacaban fuerte, la agarrabas de sobrepique, la devolvías
globeada y ahí empezabas el punto realmente.
También cambió porque los jugadores están
más entrenados, por las paletas..
¿Y
cómo se podría cambiar el tema del saque?
R.G.: Habría que ver, sacar de un poco más
atrás, para que la red quede más alta,
achicar la zona de saque...
¿Es
más lindo ahora?
R.G.: Puede ser, no sé, pero seguro que es más
natural por lo del saque y volea.
¿Vas
a España a pesar de la normativa de la F.E.P.
que no deja jugar dos argentinos juntos varios torneos,
o eso puede dar alguna posibilidad de que se queden
acá?
R.G.: Nunca quiero decir que no, pero tiene que salir
algo muy especial y que me sirva mucho económicamente,
pero realmente no me gustaría.
¿Qué
te parece esa famosa normativa?
R.G.: Muy mal, primero porque todo lo que prohibe mejorar
tira para abajo, y yo no creo que esto sirva para el
pádel, porque en España la idea es sacar
jugadores nuevos, pero esa no es la manera. Esto es
retener jugadores antiguos que no tienen gran nivel.
Varios jugadores. Lo importante sería hacer escuelas
para chicos, y si quieren saber el nivel interno de
los españoles, hacen cuatro nacionales en los
que no pueda jugar ningún argentino y después
hacen todos abiertos. Más en este momento que
están aprovechando que vamos muchos argentinos,
y que el pádel acá, aunque en cantidad
de gente está bien, económicamente no.
Sabiendo que los argentinos se venden por muy pocas
cosas, aprovechan esa situación. Porque nos utilizaron
para llevar el pádel a lo que es allá,
y ahora que está muy bien cortan esto. Me parece
que está muy mal y no estoy de acuerdo para nada.
Quisiera saber cuál es el sentido, porqué
ellos hacen eso. Voy a mandar una carta preguntando
porqué lo hacen.
¿Institucionalmente,
tendría que hacer algo la Argentina?
R.G.: Creo que sí, primero de parte de los jugadores,
no dejarse usar de esa manera. Nosotros llevamos allá
el nivel de juego que es muy importante, y que a nosotros
nos llevó diez o quince años lograrlo.
A los españoles les va a costar, y deberían
hacerlo con escuelas o con millones de torneos como
hicimos acá. Que nos corten eso ahora para ser
empleados de ellos, no me parece bien. Muchos jugadores
son muy egoístas y piensan en ellos solos, y
se creen que "en este momento a mí no me
toca porque yo ya arreglé con un español"
o lo que sea, y que lo piensen todos, si ese español
se lesiona, o decide que no le gustó como estás
pegando el revés y quiere jugar con otro compañero,
o no le cae bien el look, o tiene la posibilidad de
jugar con otro argentino que le cae mejor, después
no tenés otro español para elegir, no
hay más. Que piensen en grande, en todo el pádel,
no en el momento. Vos vas ahí, estás entrenadísimo,
pero perdiste tres torneos en primera ronda, o te toca
con Auguste, y el español le va a echar la culpa
al argentino, como pasa en pádel, "no quiero
jugar más con vos", y te quedás colgado,
no podés elegir a nadie. No es como acá
en Argentina, que bueno, mañana no juego con
Cristian, y juego con Poggi, juego con Matías
Díaz, o con Gonzalo Díaz, o con Vilas.
Son todos buenos. Mieres, también... tenés
mil que juegan bien. Allá no, allá de
los tres o cuatro buenos que hay, hay un escalón
gigante, que no podés hacer nada.
Matías
Vilas me contaba que le tocó jugar qualy con
pibes que acá jugarían en cuarta...
R.G.: Y primera ronda campeonato también. Te
encontrás con jugadores de bajo nivel que por
ahí son cinco o seis en el ránking español
(Almazán, Inglés) y son flojos, les ganás
6/1 y 6/1, hay una diferencia enorme. Hay una camada
de jugadores grandes que quieren seguir jugando, y quieren
mantener el pádel en sus manos, pero ya se les
fue, porque fueron muchos jugadores argentinos y ahora
quieren tratar de durar un tiempito más, pero
no lo van a lograr, porque no es que van a mejorar ellos
el nivel, bajan el nivel general como para poder seguir
estando, ganando una o dos rondas, porque igual no van
a podere ganar mucho. Algunos se creen que decir soy
cinco o seis de España les da prestigio, pero
no es verdadero porque están bajando el nivel,
dejando también jugadores argentinos con mucho
nombre afuera.
Creo que en el pádel, tanto en Argentina como
en España, habría que cambiar varias reglas,
agilizar varias cosas como para que mejore. Algunos
toman reglamentos viejos o cosas como por ejemplo del
tenis, que es un deporte espectacular y muy organizado,
pero hay cosas que no podés tomar. Hay que tratar
de no poner trabas y agilizar.
Este año estábamos en Sevilla y la mamá
de Alejandro Lasaigues estaba muy enferma, acá
en Argentina, y no me dejaron anotar con el compañero
de Mariano Lasaigues (porque ninguno de los dos iba
a jugar), pero sí se cambió el cuadro,
sin ponernos a nosotros. Hicieron cuadro nuevo porque
nosotros y Mariano con Montes estábamos preclasificados,
pero no nos dejaron anotar. Es ridículo, se puede
hacer como se hacía antes en el tenis, si el
jueves empieza el campeonato, el jueves a la mañana
firman todos los que van a jugar y de ahí se
saca el cuadro. Estaban todos desesperados porque yo
juegue, los organizadores, todos, y no me dejaron jugar.
Hay cosas en las que los jugadores estamos muy desprotegidos,
como le pasó a Gastón Malacalza cuando
tuvo el accidente en la moto, y le pusieron un cero.
El accidente había sido cuatro o cinco días
antes, pero no se pudo borrar porque ya se había
anotado y estaba hecho el cuadro. El día antes
se firma y con todos los que están se hace.
A
lo mejor nos faltaría una Federación Internacional
fuerte.
R.G.: Sí, la FIP está pero no hace nada,
son poco prácticos. Acá también,
an Argentina hacen cada cosa a veces. Toman reglamentos
muy estrictos para algunas cosas y para otras no existen.
Tenemos que tirar todos para mejorar el deporte. La
base en Argentina es espectacular, y además está
creciendo de nuevo. En el interior se está jugado
bastante, el día que se empiecen a hacer las
cosas bien y haya un poco de plata va a explotar otra
vez fuerte.
Por
televisión hay deportes que son más chicos,
y de pádel hay un solo programa en cable...
R.G.: Sí, y no hay deporte, salvo el fútbol,
que se juegue tanto como el pádel. En el interior,
yo voy y es impresionante como me conocen, por ahí
la cara no, pero el nombre, que sonó mucho, sí.
En
marzo hay elecciones ¿qué opinás?
R.G.: Que tiene que haber alguien que haga cosas, que
se equivoquen o no, pero que hagan muchas cosas, que
se tiren ideas, que se muevan y que los jugadores se
sientan apoyados, y a su vez que los jugadores respondan,
porque los jugadores muchas veces nos quejamos pero
tenemos que hacer las cosas. Nosotros somos el pádel,
entonces tenemos que hacer cosas. Creo que la APP es,
en este momento, una de las cosas más fuertes
que hay en el pádel en Argentina, y podría
hacer muchas más cosas de las que está
haciendo.
Si
te doy el pádel argentino ¿qué
la cambiarías?
R.G.: Primero comunicaría a la gente, porque
al pádel se lo tiró muy abajo con las
lesiones, con muchísimas cosas y yo creo que
es un deporte muy bueno, que sirve tanto física
como mentalmente. Por los medios haría saber
que es muy sano, que muy poca gente se lesiona, yo estoy
jugando hace diez años todos los días,
y nunca en mi vida me lesioné; que piense la
gente que lo dejó porqué lo dejó,
y no está haciendo deporte, y eso es lo que hace
daño de verdad. Me encuentro con gente que dejó
de jugar y que está pesando diez o quince kilos
más y me dice "no, no quiero seguir jugando
por tal cosa", y eso sí que no es salud,
y demostrar que es un excelente deporte.
Otra cosa que haría es sacar la pica que tiene
el pádel con el tenis, porque son dos deportes
excelentes. El tenis es un deporte con una historia
inigualable con el que no tenemos porqué estar
enfrentados.
También trataría de acomodar las categorías.
En el pádel se mintió mucho con el tema
de las categorías, gente que se anotaba en cuarta
siendo de segunda para ganar premios.
¿No
se podría hacer como en tenis, un carnet con
ascenso y descenso de puntuación?
R.G.: Sí, se tendría que hacer eso, se
tendrían que hacer más interclubes. Se
pueden hacer millones de cosas, pero organizándolo.
Es un deporte que tuvo mucha explosión, que cada
uno hizo lo que quiso y se le fue a todo el mundo de
las manos.
Hablaría con la Secretaría de Deportes
para que nos apoyen, porque es uno de los pocos deportes
en los que Argentina tiene campeones del mundo.
Realmente es una pregunta para pensar muchísimo,
pero la verdad es que me gustaría tenerlo y poder
manejarlo.
¿Y
porqué no hay apoyo de la Secretaría de
Deportes?
R.G.: Porque hubo muchos líos, en una época
que se nos apoyó un poco hubo problemas de plata
que desapareció, pero bueno...
Yo creo que es un deporte muy representativo de Argentina,
porque por más que se haya creado en México,
cuando hablás de pádel es Argentina, y
creo que se tendría que defender todo eso.
Tenés
treinta y tres años, vos entrenaste toda tu vida,
pero hay jugadores que a tu edad ya piensan en el retiro
¿por cuánto tiempo más tenemos
Gattiker?
R.G.: Fisicamente la naturaleza te ayuda o no, podés
tener cuarenta y estar bárbaro o tener treinta
y cuatro y estar hecho pelota, pero más que nada
pasa por las ganas que tengas de jugar, y ahora tengo
muchísimas ganas, me muero si no tengo competencia
y si no tengo deporte. Me cuido muchísimo, y
entrenándome, si las ganas me dan, tres o cuatro
años más puedo jugar tranquilamente bien.
Nunca jugaría si me doy cuenta de que no puedo
jugar para ganar, porque a mí me gusta, en lo
que hago, ser el mejor. Si pierdo, encantado, pero entro
a ganar.
¿No
te gustaría entrar y perder en segunda ronda?
R.G.: Sabiendo que voy a perder en segunda ronda, no.
Puedo perder en segunda ronda, pero sabiendo que puedo
ganar el torneo.
Me pasa en muchas cosas, en cosas que me hubiese gustado
hacer, pero que me di cuenta de que no las podía
hacer porque no era bueno, y más en una cosa
en la que me fue y me va tan bien. |